
Mi imaginación crea cosas a partir de la única y sola sustancia que compone el universo.
Mi imaginación y voluntad actúan juntas y todas las cosas se vuelven posibles.
Mi mente forma lo que quiera a través de la imaginación.
Ahora, en mi mente, las imágenes mentales, las ideas y los pensamientos me sanan, me bendicen, me hacen prosperar, me motivan y me fortalecen.
Soy capaz de hacer realidad todo lo que mi mente sea capaz de imaginar y sentir como verdadero.
La imaginación gobierna mi mundo.
Las imágenes que contemplo y acepto conscientemente como verdaderas, se imprimen en mi mente subconsciente y se manifiestan en mi vida.
Toda imagen que creo en mi mente con emoción, acaba sucediendo.
La imaginación es más grande que el conocimiento.
Imagino un final feliz y aquello que contemple será lo que experimentaré.
La vida es el espejo que refleja las imágenes de mi pensamiento.
Mi imaginación es el poder creativo que puede y logra el fin sin esfuerzo y de forma natural.
Imagino y acepto sólo los pensamientos y sentimientos que contribuyen a mi felicidad.
La imaginación crea la realidad.
Vivo totalmente en el nivel de la imaginación.
Si cambio mi imaginación, cambio los hechos.
La imaginación es creativa, la voluntad dirige.